Pular para o conteúdo principal

ORACIONES


1. Señor Jesús, yo creo en ti.
Pienso en ti.
Te doy las gracias.
Te glorifico, te alabo, te amo y te adoro.
Lávame con tu sangre preciosa y purifícame de todo mi pecado. Amén. (El 30.07.95)

2. Señor, abre mi corazón, para que pueda comprender tu palabra como Nuestra Señora. Amén! (San Miguel el 25.12.95)
       
3. ¡Gloria a Dios y bendito sea nuestro Señor y la Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen María, su Santísima Madre. Amén. (San Miguel el 25.12.95)

4. Jesús, te amo. Jesús, te adoro. Jesús, quiero que Tú vivas en mi corazón. (13.12.95)

5. Mi glorioso San José, cuida de mi familia: hoy, mañana y siempre. Amén. (Tres veces)

6. ¡Oh Jesús!, sé nuestra luz, nuestra fuerza y nuestra vida.
Jesús, sálvanos de todo mal y de todo peligro.
Jesús, confiamos en ti.
Creemos que nuestros problemas más urgentes están siendo resueltos.
Salva nuestras familias.
Salva a nuestros hermanos alejados, incrédulos y ateos.
Salva al mundo entero y a las familias que no viven la paz y el amor. Amén.        
7. ¡Oh Sagrada Familia de Nazaret, Jesús, María y José en este momento, nos consagramos a ustedes verdaderamente, con todo nuestro corazón.
Protégenos y defiéndenos contra los males de este mundo, para que nuestros hogares sean siempre solidificados en el amor infinito de Dios.          
Jesús, María y José, los amamos con todo nuestro corazón.
Queremos ser totalmente suyos.
Ayúdennos a hacer la voluntad del Señor, verdaderamente.
Guíennos siempre a las glorias del cielo, ahora y para siempre. Amén. (03.03.97)

8. Señor Jesús, aumenta mi fe, renovándome con tu Amor Divino y tu Santa Luz, para que así pueda servirte y seguirte verdaderamente. Jesús, en ti confío. Amén. (15.02.97)

9. Rosario de la Sagrada Familia (07.01.97)

Emplear un camándula común de cinco decenas

Oración
Mi Sagrada Familia del Cielo guíame por el camino recto, cúbranme con su manto sagrado y protéjanme de todo mal, durante mi vida aquí en la tierra y por siempre. Amén.

Rezar un Padre nuestro, un Ave María y un Gloria.

Jaculatoria
Sagrada Familia y Ángel de mi Guarda rueguen por mí. Amén.

           Rezar un Credo.

En todas las decenas

En las cuentas del Padre nuestro
           Dulce Corazón de Jesús sé nuestro amor.
Dulce Corazón de María sé nuestra salvación.
Dulce Corazón de José sé el guardián de nuestra familia.

En las cuentas del Ave María
V. Jesús, María y José, los amo
R. Salven las almas

En las últimas tres cuentas
V. Sagrados Corazones Unidos de Jesús, María y José.
R. Hagan que los ame cada vez más.    

10. Rosario de las Llagas del Corazón de María
Este Rosario fue dictado por Nuestra Señora, en su aparición, el día 11.04.95, para que sea rece por todos sus hijos, en reparación a Dios por los pecados cometidos por el mundo entero y para la salvación eterna de las almas.          

Emplear un camándula común de cinco decenas

Ofrecimiento
¡Oh Corazón Doloroso y Herido de María!, te ofrezco este Rosario que voy a rezar meditando los grandes dolores y tristezas causadas a Ti por la pérdida de muchas almas, que cada día se precipitan eternamente al fuego del infierno.
Te lo ofrezco en reparación a Dios por tantos pecados y blasfemias, que son las causas  de la pérdida de estas almas, para que así, estas mismas almas encuentren en tu Corazón Doloroso y Herido la gracia y el valimiento, para obtener de Dios, a través de Tu poderosa intercesión, la salvación eterna. Amén.    

En todas las decenas

En las cuentas del Padre nuestro
Jesús Inmaculado, ten piedad de nosotros, perdona nuestros pecados, líbranos del fuego del infierno.
Por la intercesión de la Bienaventurada Virgen María y sus Lágrimas de Sangre.

En las cuentas del Ave María
¡Oh Corazón de María!, herido de dolor por la pérdida de muchos pecadores salva las almas de tus hijos queridos, del peligro de caer en el fuego del infierno.

En las últimas tres cuentas
V. Padre amado, yo te amo; Madre amada, yo te amo
R. Padre amado y Madre amada, yo los amo, yo los amo, yo los amo.

Consagración al Doloroso e Inmaculado Corazón de María
(Enseñada por Nuestra Señora)

¡Oh Corazón Doloroso e Inmaculado de María!, profundamente herido por una llaga ardiente y viva causada, principalmente, por la pérdida de muchas almas.
Yo, tu hijo (a) querido (a), vengo en este momento a consagrarme a tu Dolorosísimo e Inmaculado Corazón, prometiendo serte fiel a las enseñanzas de Tu Hijo Jesús, especialmente al gran mandamiento nuevo, enseñado por Jesús en la última cena: Ámense unos a otros como yo los amo.
¡Oh María!, Virgen Dolorosa, ten compasión de nosotros ante Tu Hijo Jesús por nuestra salvación eterna.        
Consagramos a Ti toda nuestra vida, nuestra alma y nuestro cuerpo, así como toda nuestra familia a tu Dolorosísimo e Inmaculado Corazón.
Guíanos y protégenos de todo peligro, principalmente de nuestro gran enemigo, apartándolo de nosotros y dándonos fuerzas para vencer sus seducciones y sus ataques contra nosotros.
¡Oh Virgen Purísima!, cúbrenos con tu pureza y ayúdanos a vivir totalmente puros para Tu Hijo Jesús, para que como Tú, podamos brillar en santidad y así podamos lograr el aspecto de Tu Hijo Jesús por toda la eternidad. Amén.

11.  ¡Oh María!, Virgen Santísima e Inmaculada, bendícenos y protégenos contra todo mal.
En este momento nos entregamos, verdaderamente, a Ti, de corazón, de alma y cuerpo. ¡Oh Madre de Dios!, sé nuestra salvación ahora y en el último momento de nuestra vida.  Llévanos a Jesús y pide por nosotros al Señor, porque Él nos dé su paz y su amor. Amén! (14.04.97 – San Miguel).

12. Padre del Cielo, yo te amo. Pósate aquí en mi hombro. Yo quiero hacerte un cariño y pedirte perdón por todas las personas que no saben acariciarte y pedir su perdón. Perdóname Señor. Amén. (03.04.97- Jesús)

13. De ahora en adelante, durante su vida aquí en la tierra, cuando entren en una Iglesia, procuren primero ir ante El Santísimo Sacramento del Altar. Recen un poco, y luego busquen un lugar para sentarse.

Esta oración es para ser rezada delante del Santísimo Sacramento del Altar:
¡Oh mi Jesús en el Santísimo Sacramento del Altar!, estoy aquí delante de Ti, para pedirte lo que sea necesario para mi familia y para todas las personas del mundo entero y te agradezco por todo lo que has hecho por ellas por mis familiares hasta la cuarta generación, por los familiares de mi esposo (a) hasta la cuarta generación y por toda la humanidad.
     Te doy gracias, Señor, por todas las personas que no saben agradecerte. Amén.

Desde su asiento, las rodillas, de pie o sentado continúen orando:
¡Oh mi Jesús Sacramentado!, ten misericordia de las almas de mi familia, perdona sus pecados y concédeles la salvación eterna.
¡Oh mi Jesús Sacramentado, ten misericordia de las almas de mis familiares hasta la cuarta generación, perdona sus pecados y dales la salvación eterna.
¡Oh mi Jesús Sacramentado!, ten misericordia del alma de los familiares de mi esposo (a), hasta la cuarta generación, perdónales sus pecados y dales la salvación eterna.
¡Oh mi Jesús Sacramentado, ten misericordia del alma de mis vecinos, de mis amigos, de mis enemigos, de los agonizantes, de las almas del Purgatorio, de los encarcelados, de los malvados, de los malhechores, de los criminales, perdónale sus pecados y dales la salvación eterna.
¡Oh mi Jesús Sacramentado!, ten misericordia del alma de los ateos, de las personas que tú amas, de las personas que nos persiguen, de las personas que nos critican, de las personas que no saben amar a Dios sobre todas las cosas y a sus hermanos como a sí mismos, perdónales sus pecados y dales la salvación eterna.
¡Oh mi Jesús Sacramentado!, ten misericordia de las almas de las madres que abortarán a sus bebés, de las madres que abandonarán a sus hijos, de las personas que abandonarán a su padre y a su madre en los asilos, de las personas que practicarán el adulterio, perdónales sus pecados y dales la salvación eterna.    
¡Oh mi Jesús Sacramentado!, ten misericordia del alma de todos tus hijos, buenos y malos, muchos de ellos no saben lo que hacen. Amén.

Gracias por atenderme. Yo y mi Madre te bendecimos: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. (En 02.04.97-Jesús)

14. ¡Oh Jesús!, te amamos con todo mi corazón.
Sálvanos de todos los males y peligros.
Sé para todos nosotros nuestra salvación eterna.
¡Oh Jesús!, queremos ser totalmente tuyos, danos tu gracia para que podamos, verdaderamente, vivir tu palabra.
Jesús, nuestras vidas estén comprometidas en el amor, en el servicio, en las buenas obras para aquellos que necesitan tus bendiciones.
Envíanos tu Espíritu Santo de la donación para que estemos enteramente dispuestos a vivir el Evangelio, renovando todo y todas las cosas.
Te amamos y nos entregamos a Ti verdaderamente y en profundidad, ahora y por siempre. Amén. (28.04.97 –
(Para que los sacerdotes la recen diariamente pidiendo la gracia y la santidad de Dios)

15. Señor Jesús, te pido en este momento que tu Santísima Voluntad se cumpla en mi vida, para que sirviéndote, pueda vivir en paz, llevar la paz, transmitiéndolq a todos mis hermanos que no la poseen.
¡Oh Jesús amado!, mi corazón está herido a causa de los pecados cometidos y las repetidas caídas.
Ven a ayudarme y con tus Manos Santas, sana mi corazón que tanto necesita de tu amor.
Transforma mi corazón de piedra en un corazón de carne, renovándolo totalmente en el amor y por amor.
Yo te amo, ¡Oh mi Jesús!, y que mi amor pueda consolar a Tu Sagrado Corazón y al Corazón Inmaculado de la Santísima Virgen, así como también al Castísimo Corazón de San José.
Deseo pertenecer totalmente a ti y que a la hora de mi muerte Tú seas ¡Oh mi Jesús!, mi eterna felicidad y paz en mi corazón. Amén (11.07.97)

16. Señor, santifica a todos los sacerdotes por los méritos de Tu Santa Pasión para que ellos puedan ser Tu verdadera imagen, pura y santa en el mundo .Amén.

17. Señor, por la amargura que sentiste por el beso traidor Judas, lleva de regreso hasta tu gracia santificante a todos los sacerdotes que fueron infieles a su vocación y que continúan obstinados en los pecados del mundo.
Te lo pedimos por la intercesión del Inmaculado Corazón de María y del Castísimo Corazón de San José. Amén (20.10.97)

18. Mi Jesús Misericordioso, deseo ser uno de aquellos que vengan a consolar Tu Santísimo Corazón.
Fórmame en la experiencia de amor, de la paz y de la unidad.
Jesús, cada día que pasa mi amor por ti tiene que ser encendido.
Ayúdame a amarte más y más, pues mi vida depende de ti, porque El Señor es el dueño de mi vida.
Te doy gracias Jesús por todas las gracias recibidas.
Que mi corazón te ame, te adore y te glorifique a cada momento. Amén (24.10.97)

19. Señor yo creo pero aumenta mi fe por intercesión del Inmaculado Corazón de María y del Castísimo Corazón de San José (Tres veces) (20.11.97)

20. Señor, salva a las familias de la perdición y la condenación eterna.
Que la Virgen María, Reina de la familia, sea nuestra protectora e intercesora junto a Ti, para que recibamos de Tu Sagrado Corazón las gracias necesarias que nos llevarán a la gloria del Paraíso. Amén.

21. Mi glorioso San José, por las gracias de tu Castísimo Corazón, salva a la Santa Iglesia de los ataques de Satanás y defiende con tu intercesión y poder la devoción a los Corazones de Jesús y María.
Dios te otorgó un gran poder y gloria.
Toda mi vida quiero ser tu siervo y amarte con el mismo amor de Jesús y María. Amén. (23.11.97-Jesus)

22. Consagración a María Reina de los Jóvenes
¡Oh María!, Reina de los jóvenes, a Tu Corazón Inmaculado nos consagramos en este momento.
Deseamos ser para Ti tus siervos fieles.
Madre querida, salva a todos los jóvenes del camino de la perdición.      
Prometemos  dar testimonio de Jesucristo a todos los jóvenes que no conocen su amor y tu  amor de Madre.
La Mano de Dios, sea nuestra guía.
Somos tus hijos tan frágiles y pequeños que aún no saben cómo caminar y vivir el amor verdadero.    
Sé nuestra guía a Jesús, te amamos y decimos gracias por ser nuestra Madre y Reina de todos los jóvenes.
Reina en el mundo con tu Hijo y entre todos los jóvenes. Amén (24.11.98)

23. Padre, hágase tu voluntad y que Tu nombre sea glorificado siempre.
Padre, te agradezco por todo lo que El Señor va a realizar en mi vida, por mi salvación. Quiero ser tuyo (a) y amarte con un amor sin medida.
Toma mi corazón, porque es tuyo. Padre, yo te amo, te amo, te amo. Amén (01.04.99)

24. ¡Oh Jesús amado!, deseamos hacer Tu voluntad.
Está siempre con nosotros y defiéndenos contra todo mal.
¡Oh Jesús!, te amamos, adoramos y glorificamos.
Sé nuestra fuerza y nuestra luz.
Que tu paz esté siempre en mi corazón.
Sálvame, sálvame, sálvame, así como también a toda mi familia.
Mi corazón es tuyo, ahora y para siempre. Amén (26.04.00)

25. María, Reina de la Paz, concédenos por tu intercesión la cura de nuestro cuerpo y nuestra alma.
Ruega a Dios por nosotros, porque somos tus hijos que necesitamos de tu auxilio materno.
Tú eres nuestra Madre materna que nunca desampara a sus hijos en sus aflicciones.
Gracias María Santísima, mi Madre querida, por tu amor y porque pides por nosotros a Jesús, Tu adorable y Divino Hijo.
Te amamos y te agradecemos por todo lo que haces por nosotros.
Gracias, gracias, gracias. Amén. (05.06.00)

26.  Ven Espíritu Santo y renueva a toda la humanidad con tu amor divino.
Transforma nuestros corazones endurecidos y sin amor en un horno vivo de amor ardiente. ¡Oh Espíritu Santo!, realiza tus maravillas en nuestras vidas y permite que tu inmenso amor pueda ser llevado a todos los hombres, para que conozcan Tu Santa presencia.
¡Oh Espíritu Santo!, la Iglesia necesita ser renovada y transformada por Tu luz.
Que ella pueda ser reanimada y viva en la fe para que, así, se realicen los milagros de tu amor.
Ayúdanos a ser fieles a nuestros compromisos con la iglesia, para que ningún obstáculo o barrera venga a apartarnos de la fidelidad para con ella.
Consagramos nuestra vida, nuestra alma y nuestro corazón a Ti.
Te agradezco porque Tú eres nuestro Dios y nuestro Soberano Señor.
Ilumínanos, guíanos y protégenos. Amén (11.06.00)

27. Misericordia Jesús. Misericordia para todos los pecadores. Misericordia para toda la humanidad (Tres veces) (10.07.03)

28. ¡Oh Jesús!, queremos entregarte nuestros corazones a Ti, para que cada día sean iluminados por Tu divina gracia.
¡Oh Jesús!, acepta todo aquello que te ofrezco en reparación por tantos ultrajes, blasfemias y sacrilegios que son cometidos por todos los hombres, en muchos lugares del mundo.
Acoge mi ofrenda que tengo para ti y que mi amor, que es tan poco, pueda al menos consolarte y alegrarte.
Realiza tu voluntad en mi vida y que en mi nada haga tu obra de amor, porque soy tuyo (a). Jesús, yo te amo, te amo, te amo. Amén (09.10.03)

29. ¡Oh Jesús!, yo te amo y te ofrezco mi corazón para que lo transformes en tu morada.
¡Oh Jesús!, deseo vivir contigo testimoniando a todos mis hermanos tu amor misericordioso.
Jesús, sálvame, sálvame, sálvame. Amén. (25.12.04)

30. ¡Oh Señor!, bendice al mundo entero y a las familias.
Ayúdanos a vivir el amor, la paz y la unión constantemente, para que tu gracia y renueve toda la faz de la tierra.    
Señor, ten misericordia de aquellos que aún no se decidirán a seguir tu llamado.
Ayúdanos a encontrar tu luz que ilumina y salva y así todos los corazones se abrirán a Ti.
Señor, Misericordia. Amén (28.11.04)

31. ¡Oh Jesús!, ten misericordia de todos nosotros, pobres pecadores.
Lávanos con Tu Preciosísima Sangre y conviértenos.        
Jesús, yo creo en Ti.
Jesús, yo confío en Ti.
Sálvanos, ¡Oh Señor!
Salva al mundo y a la iglesia. Amén. (23.10.05)

32. Jesús, dame tu luz, tu gracia y tu amor.
Jesús, cura mi alma de todo mal, libérame de toda debilidad y de todas las cosas negativas de mi pasado.
Quiero ser tuyo (a) y hacer tu voluntad. Amén (15.01.07)

33. ¡Oh María Reina del mundo!, ruega por el mundo entero y especialmente por Brasil. (11.04.95)

34. Ven Espíritu Santo y renueva nuestros corazones, nuestras almas, nuestras familias y toda la faz de la tierra con tus cálidos rayos de amor y de luz.      
Ven Espíritu Santo, dador de todas las gracias y dones y abrázanos con tu luz, abriéndonos a la gracia divina y santificándonos con tu santa presencia.      
Ven Espíritu Santo, bendice a toda la humanidad, a toda la Santa Iglesia iluminándola con tu luz, revistiéndola con tu poder y renovándola con el fuego purísimo proveniente del Corazón del Padre, del Hijo y de Ti, la Luz Pura y Santa, El Señor Soberano y Santificador de nuestras almas.      
Ven Espíritu Santo y cuida de todo y de mi ser.
Ven a ser el dueño de mi corazón y de toda mi vida.
Soy completamente tuyo (a).
Haz de mí lo que quieras.
Estoy aquí para hacer tu voluntad y que Tu Palabra Viva: Palabra de Vida y de Verdad, sea la fuerza y la fuente que haga brotar de mi corazón ríos de agua viva. Amén (02.01.97)

35. Rosario del Perdón
Jesús y Nuestra Señora me enseñan este Rosario a mí y a mi madre para que todos lo puedan recitar siempre pidiendo perdón de sus pecados.
Por medio de este Rosario Jesús nos concede la gracia de saber perdonar a quien nos ofendió y de saber pedir perdón de nuestros pecados y faltas, librándonos de la soberbia, del orgullo y de una vida de falsa humildad.

Emplear un camándula común de cinco decenas

Rezar un Credo

En todas las decenas

En las cuentas del Padre nuestro
Mi Jesús crucificado, por tu Sangre derramada perdona nuestros pecados, Señor.
Perdón, perdón, perdón.

En las cuentas del Ave María
Perdón, perdón Señor, perdona nuestros pecados Señor.

Al finalizar las decenas
Rezar una Salve

36. ¡Oh mi Madre María Santísima y mi Padre Virginal San José, denme sus Corazones Santísimos para que yo pueda recibir dignamente a Nuestro Señor Jesucristo, como Él mismo se lo merece! (Tres veces).

Nuestra Señora me enseñó esta oración para ser rezada antes de recibir la Santa Comunión.
Esta oración prepara nuestros corazones a Jesús, abriéndolos y santificándolos para él.

37. Hoy, domingo, 29.12.96, Fiesta de la Sagrada Familia, Nuestra Señora me enseñó una Consagración para rezarla a lodos tres Corazones unidos en un solo amor.

Enseña esta consagración a todos tus hermanos
Es una Consagración a los Tres Corazones.
Esta Consagración se hará a nuestros tres Corazones Unidos en un solo amor.
Esta consagración debe realizarse tres veces al día: por la mañana, tarde y noche.
Hacerse la señal de la Cruz, decir las palabras y consagren todo su ser a nuestros Santísimos Corazones que tanto los aman.
Es importante hacerse la señal de la Cruz en el momento que se dicen las palabras

Sagrado Corazón de Jesús, Inmaculado Corazón de María y Castísimo Corazón de San José, yo les consagro en este día mi mente †, mis palabras †, mi cuerpo †, mi corazón † y mi alma † para que su voluntad se haga a través de mí en este día. Amén.   
 
Los bendigo a todos: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.          
.

         

Comentários

Postagens mais visitadas deste blog

PECADO SENSUAL CONTRA A NATUREZA.

No Apocalipse está presente tal condenação. A primeira condenação, implícita e muito forte, já a encontramos no relato da criação do Homem. Como coroamento da Sua obra, Deus fez o Homem  "à Sua imagem"... E fê-lo  "varão e mulher". Prossegue a Escritura:  "Deus abençoou-os e disse-lhes: 'Sede fecundos, multiplicai-vos, enchei a Terra e submetei-a' "  (Gn 1, 27-28). Esta passagem encerra um dos fins da diferenciação sexual:  a procriação . Será esta a única razão pela qual Deus criou dois sexos na espécie humana? Não é; pois o homem e a mulher são diferentes também para que se possam completar mutuamente. O isolamento do homem é descrito, pelo Génesis, como um mal: "Não é bom que o homem esteja só. Vou fazer-lhe uma auxiliar, que lhe corresponda"  (Gn 2, 18). Ao ver a mulher, tirada do seu lado, o homem exclama, exultante: "Esta, sim, é osso dos meus ossos e carne da minha carne!"  (Gn 2, 23). Ao contrário dos irracionais, q

NOVENA À SANTA JOANA D'ARC

Rezemos pedindo a intercessão de Santa Joana D'Arc pela santificação e conversão dos jovens mais rebeldes, perdidos e ingratos, que se encontram distantes dos três Sagrados Corações unidos de Jesus, Maria e José. I ORAÇÃO: Ó Santa Joana d’Arc, vós que, cumprindo a vontade de Deus, de espada em punho, vos lançastes à luta, por Deus e pela Pátria, ajudai-me a perceber, no meu íntimo, as inspirações de Deus. Com o auxílio da vossa espada, fazei recuar os meus inimigos que atentam contra a minha fé e contra as pessoas mais pobres e desvalidas que habitam nossa Pátria. Santa Joana d’Arc ajudai-me a vencer as dificuldades no lar, no emprego, no estudo e na vida diária. Ó Santa Joana d’Arc atenda ao meu pedido (pedido). E que nada me obrigue a recuar, quando estou com a razão e a verdade, nem opressões, nem ameaças, nem processos, nem mesmo a fogueira. Amém! 1 Pai Nosso, 1 Ave Maria e 1 Glória II ORAÇÃO: Ó mais pura Virgem e Gloriosa má

Os primeiros cristãos celebraram a missa assim: o altar da cripta das catacumbas de Sant'Antioco (Sardenha)

Tiramos esta foto de uma página do Facebook (link abaixo), onde há vários insights históricos / litúrgicos interessantes sobre a celebração "  ad orientem  "  ,  fruto do admirável conhecimento histórico / litúrgico de Filiberto Maiori que agradecemos.  Fazendo-nos infelizmente perceber que "  aqueles que lidam com liturgia e com a ciência litúrgica histórica geralmente partem de posições  " progressistas  "e, conseqüentemente,"  lêem história através dos filtros da ideologia  ", esperamos que pelo menos as comunidades ligadas à liturgia" clássica "possam criar o mais cedo possível, uma espécie de instituto litúrgico tradicional, onde "  a ciência litúrgica é ensinada sem preconceitos ideológicos  ".   CA Sardenha, Sant'Antioco *: Altar na cripta das catacumbas     Como pode ser visto na foto, o túmulo do santo tornou-se o altar.  O layout em orientem e o altar de pedra  eles são a reminiscência direta de q